A la hora de comprar un yate tienes dos
opciones, dependiendo del dinero que dispongas para
llevar a cabo tal inversión.
La primera sería comprar uno nuevo a
estrenar, en éste caso debes preocuparte por buscar un modelo y marca que sean
de tu agrado y saber que comodidades y confort quieres.
Pero hay algo más y muy importante, se trata de la tributación es
decir impuestos y tributos según el país en el que realices la compra, La
inspección técnica de buques y la documentación
administrativa necesaria
relacionada con la compra.
Lo más recomendable es que lo dejes en manos
de una gestoría ya que debes tener todo
en orden para que no te sancionen.
La segunda opción sería que adquirieras uno
de segunda mano, para lo cual deberías tener varios aspectos en cuenta, como por ejemplo:
Uno de los puntos mas importante es que no se
encuentre afectado por la ósmosis, esto es humedad en la fibra de vidrio
(material con el que esta fabricado)
En lo posible que no tenga abolladuras ni
grietas
Debemos comprobar: Los pasa cascos, llaves de fondo,
grifos, válvulas, desagües, prensa estopas, ejes del timón, el estado del motor
y de las hélices, el perfecto estado del ensamblaje entre el casco y la
cubierta etc.
Es importante que en caso de no tener conocimiento
suficiente contrates a un profesional en el tema para que te asesore y ayude a
revisar la embarcación antes de comprarla, igualmente puedes solicitar al
vendedor la ITB, la cual es una especie de certificación que avala que el yate
se encuentra en óptimo estado.